La Paz

La paz .- Ana Cervera“Bienaventurados los que trabajan a favor de la paz”

La paz es un don del Espíritu. La paz es nuestra parte más divina. La paz nos acerca al Padre. La paz  nos hace amantes de Dios. Trabajar a favor de la paz, buscar la paz  es trabajar para Dios. Cuando hay paz hay creación, y crear es progresar y en el progreso  está la mano de Dios

Esta bienaventuranza continúa así: “porque serán reconocidos como hijos de Dios”

Cuando hay paz, el Espíritu,  al encontrar espacio, se ensancha y da paso a todos sus dones. Tras la paz, y unida a ella como la otra cara de la moneda, viene la justicia, y de su mano se enraíza el amor.

Trabajar a favor de la paz es una manera de amar,  supone avanzar a favor de la persona, de su progreso, y por tanto el de la humanidad.

De manera natural, los hijos se parecen a sus padres, por tanto: Bienaventuradas las personas que trabajan a favor de la paz, las que buscan la paz donde estén, porque además de ser felices por ello, serán reconocidos como hijos de Dios, y por eso les llamarán hijos de Dios.

Isa

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